23/7/12

The dark knight rises

Era la Navidad de 1993. Estaba en casa de la abuela. Me desperté y corrí al árbol navideño. Debajo vi mi zapato, el de mi hermana y el de dos primas que no vivían en la misma ciudad que la abuela y vacacionaban como nosotros. Aventé el zapato, tomé los dos regalos envueltos y rompí el papel. Detrás de la envoltura estaban Bruce Wayne y Dick Grayson con sus trajes removibles.  Ese día comenzó mi colección de figuras de acción de Batman. De ahí en adelante, cada Navidad y Día de Reyes pedía cosas de Batman -excepto ese 25 de diciembre en el que amaneció en el pino una bicicleta de montaña-; y como fui un niño bien portado -o mimado- siempre me trajeron lo que pedía.

La familia de mi mamá es muy numerosa. Para ser exacto, fueron quince hijos. Ya imaginarán el número de nietos de mi abuela: ¡cincuenta! Uno de mis tantos primos, tenía algunas figuras de acción de Batman. Y siempre que iba a San Luis, él estaba en casa de la abuela con sus superhéroes y jugábamos. Fue él quien me presentó a Batman. 54 figuras de acción, 3 naves y una baticueva fueron lo que junté entre Navidades, Reyes y cumpleaños. Son los recuerdos físicos de mi infancia y que ahora están en la oscuridad de un clóset en casa de mis papás.

No sólo las Navidades me atan a Batman. Mi mejor amigo de la infancia y a quién le escribí la entrada Va por ti, cuando cumplió su décimo aniversario luctuoso, Charlie, también tenía figuras y jugamos por muchas horas. También mis pocas experiencias con el cine cuando era niño, están ligadas a Batman. Desde niño me fascina el cine; pero como antes no había ninguno en donde vivía y teníamos que ir a otra ciudad, pues eran pocas veces al año cuando mis papás nos llevaban. ¿Y qué películas creen que veíamos? Las de Disney y las de Batman. Uno de mis más grandes miedos era la soledad y en terapia me aconsejaron vencer ese miedo yendo solo al cine y fue una película de Batman que vi la primera vez que estuve solo en un cine -y es de lo que más disfruto ahora-.

***

Hace una semana llegaron boletos al trabajo para ir a la premiere de The dark knight rises en el Auditorio Nacional. Los rifaron y no gané. Fue una gran amiga, Edith, quien sí ganó uno, y sin saber estas historias, me lo dio. El evento prometía alfombra roja con Christopher Nolan, Christian Bale, Anne Hathaway y Joseph Gordon-Levitt y luego, el estreno de la película; pero después de la masacre que hubo en una función, cancelaron la alfombra roja y sólo dejaron la premiere. Siempre he tratado de dejar mi fanatismo de lado cuando escribo de películas. Y esta vez, de nuevo haré el intento. 

The dark knight rises es la mejor película de todas las que hay acerca de Batman. Christopher Nolan, creador de las dos últimas cintas, se superó por mucho. 

¿De qué va la película? Pasaron ya 8 años desde que Batman y Bruce Wayne desaparecieron. Sin embargo, en Ciudad Gótica una ladrona -Anne Hathaway- está haciendo de las suyas, mientras un terrorista -Tom Hardy- tiene un plan que ha construido por años y está por llegar a la ciudad para destruirla.

La música de Hans Zimmer -encargado también de la música de El Rey León, Piratas del Caribe, Inception, Rango y muchísimas más- es majestuosa; ver cómo Ciudad Gótica es destruida y los efectos son impresionantes. La cinta dura 2 horas 40 minutos y, aunque los primeros cuarenta minutos seguro les resultarán lentos a quienes no son fans,  las dos horas restantes si bien, no son ágiles, están llenas de acción. La historia es narrada fluidamente y cuando requiere usar retrospectivas, las presentan de manera muy sutil.

Aunque la sensualidad de Michelle Pfeiffer como Catwoman, en 1992, es mucho mayor a la Selina Kyle de esta versión -Anne Hathaway-, la presencia escénica y actuación de Anne es mejor. Otro que brilla con su participación es Joseph Gordon-Levitt y, hasta creo, que después de "La Batinave", es quien se lleva la película.

Está tan buena que, en los últimos cinco minutos, todo el Auditorio Nacional aplaudió y gritó de la emoción en tres escenas: cuando Gordon-Levitt dice su nombre original, en un beso entre dos personajes y cuando salen los créditos. Yo, aunque no lo crean, me evité esa gatada. Aunque ganas no me faltaron.

Si piensan continuar con la historia, el director que retome el proyecto tiene un gran reto porque Nolan hizo un trabajo extraordinario con la trilogía. 

Más que una historia de héroes y villanos, es una reflexión del anarquismo y del capitalismo. Es lo mejor que he visto en cine este año. Merece la nominación al Óscar por Mejor Película. Lástima que no sucederá después de la matanza ocurrida en Colorado.


Dicen que es la película más esperada del año. Se espera que rompa todos los récords. No lo dudo. Lo merece. 




Nota al pie de página:
Se atarugaron, queridos amigos de Warner LatAm. Con los edificios tan neoyorkinos que están enfrente del Auditorio Nacional, se pudieron haber lucido. La batiseñal saliendo del Hotel Marriot habría sido la cereza del pastel.