1/12/12

Adiós, religión; bienvenido, verdadero yo.

Cuando no te sientes cómodo con algo, es tiempo de dejarlo atrás. Un buen día decidí renunciar a esas tradiciones e ideologías que me habían impuesto 20 años atrás. La religión católica no reflejaba ya lo que pensaba. Lamentablemente a la mayoría de las personas les da pavor lo nuevo y deciden seguir cargando lo que nos les gusta durante toda su vida. 

Y después de dejar mi catolicismo, me sentí vacío; con la necesidad de creer en alguien más. Comencé a aprender del budismo, pero luego me di cuenta que si me adentraba, en realidad no estaba dejando mi catolicismo, simplemente le estaba dando otro nombre. Un día llegó a mis manos un libro, El libro del ego; lo leí y encontré muchas cosas que estaba buscando. Entre tantas, encontré libertad, la oportunidad de conocerme y creer realmente en mí.

Muchas personas creen que Osho, el autor, es un charlatán; otros lo veneran. Yo lo tomo como lo que es: un pensador reflexivo, un filósofo. El libro del ego no es un libro más de autoayuda. Es más de libertad, de reflexión; una buena oportunidad para abrir los ojos y ver las cosas de diferentes formas. 

Estoy convencido que si quiero algo, soy yo quien lo alcanzará. Ni ningún político ni ningún "santo" me lo dará. Solo yo. 

Y aunque han sido varios libros y autores los que me han servido para fortalecer mi nuevo yo, tomé unas cuantas citas de El libro del ego para compartirlas.

***
Ninguna sociedad puede salvarse, como ninguna sociedad puede ser ideal. Y no existe ningún salvador: ni Jesucristo, ni Krisna ni Rama.

Olvídate de los ideales y vive aquí y ahora.

Sé tu mismo y serás perfecto.

Dios nunca creó a otro Krisna, ni a otro Buda, ni a otro Jesucristo... No le gusta crear lo mismo una y otra vez. Es un creador, no una cadena de montaje. Es un creador original y jamás crea lo mismo.

[...] eso es lo que hacen los sacerdotes y los políticos, crear el sentimiento de culpa. Para ello se valen de ideales, un mecanismo muy sencillo. Ofrece un ideal y el sentimiento de culpa surgirá automáticamente.

La persona que provoca en ti el sentimiento de culpa adquiere poder sobre ti.

Hay que acabar con el sentimiento de culpa. Eres como Dios te ha hecho, eres lo que la existencia te ha ha hecho. La sexualidad no es una creación tuya, sino un don de Dios.

El ego es el origen de todos los problemas de la persona, de todos los conflictos, las guerras, los celos, el miedo, la depresión.

El ego te mantiene a la espera: mañana, cuando triunfes, te alegrarás. [...] hoy tienes que sufrir, tienes que sacrificarte. Si quieres triunfar mañana, tienes que sacrificarte hoy.

Cuando alguna noche duermes profundamente, tan profundamente que no tienes sueños, el ego desaparee, desaparecen todas las ficciones [...] es como una muerte en pequeño.

¿No has sentido envidia de los niños? Quizá por la envidia, condenas el infantilismo, una y otra vez [...[ Un niño es hermoso, mientras un adulto es la fealdad misma. El adulto deja de fluir, se bloquea [...] pierde brío y entusiasmo.

Los políticos, profesores, sacerdotes, teólogos, filósofos tienen la capacidad de expresarse bien. Saben dar coherencia y significado a las palabras para impresionar a al gente. Pocas veces no damos cuenta de que la sociedad está dominada por quienes saben expresarse.

Por eso hay tanto sufrimiento en el mundo: porque nadie vive con autenticdad, nadie vive su propio ser.

La identidad constituye la base para toda esclavitud: identifícate y estarás encarcelado.

[...] el poder siempre ha estado en manos de personas violentas, con otros o consigo mismos.

A las mujeres les gusta resultar atractivas poque eso les da poder: cuando más atractivas son, más poder ejercen sobre los hombres.

Las mujeres simulan que no les interesa el sexo, eso es tan feo. Están tan interesadas como los hombres, pero el problema es que no pueden demostrarlo, porque si lo hacen, los hombres las reducen inmediatamente a la impotencia, empiezan a utilizarlas.

El hombre lleva intentando una estrategia política con la mujer durante toda la historia de la humanidad: que ella es inferior a él. Y la ha convencido. Existen razones para que la mujer esté indefensa y tenga que someterse a esta idea, tan absurda como fea. La mujer no es inferior al hombre, ni tampoco superior. Son dos categorías humanas diferentes que no pueden compararse.

El pasado representa lo animal y el futuro lo divino. [...] La ciencia siempre lo reduce a todo a los orígenes, mientras que la religión siempre salta hacia el destino final.

Si existe en ti el deseo sexual, no lo reprimas, porque entonces surgirán más problemas que resultarán difíciles de resolver.

Solo cuando nos miramos cara a cara crece el amor.

No están preparados para vivir solos. La infelicidad al menos les hace compañía. Y si se separan, no saben qué hacer con sus vidas.

En el momento en que decides que ya no queda nada por aprender dejas de crecer.

Todo el mundo puede dar buenos consejos a los demás, pero cuando se trata del problema de uno mismo, se acaban los consejos porque se pierde el distanciamiento.

La atención es energía. Para el niño, la atención es potencialmente más necesaria que la leche. Algo morirá en su interior si no recibe atención. [...] En el caso de las mujeres, es cierto que el 99 por ciento de sus enfermedades, de sus problemas mentales, son básicamente necesidades de amor.

El simple hecho de poseer riquezas no significa ser realmente rico. Si sigue existiendo la ambición, eres pobre.

El futuro es un truco para aplazar el presente, el futuro es un truco para eludir el presente.

La persona libre es dueña de si misma. La persona libre es sencillamente una energía sin nombre, forma, raza ni nacionalidad. Ya ha pasado la época de las naciones y las razas y se aproximan los tiempos de los individuos.

Si no quieres tu casa, si no te gusta, no la rodearás de un hermoso jardín. Si te amas a ti mismo crearás un jardín a tu alrededor. [...]Si te amas a ti mismo, los demás también te amarán. Nadie ama a quien no se ama a sí mismo.

La persona que no se ama a sí misma no será capaz de amar.